Jesucristo Superstar

Visto que las televisiones ayer no pusieron nada demasiado "Semana Santa"-ero y visto el especial de películas de cine sobre Jesús que ayer se calcaron en Días de Cine, creo que hoy puedo dedicar el blog a hablar de una película.

La elegida, por las fechas, por lo enganchado que estoy a su Banda Sonora y por ser el título del post, será Jesucristo Superstar.

Antes de comenzar he de decir que tampoco es que sea un especialista en cine, ni en cine de Jesucristo (siendo ya más específico) así que quizás esta película se me quede pequeña al lado de otras, pero me da igual.
Tampoco soy un especialista en la Biblia por lo que sé bastante poco de la fidelidad a las Escrituras y esas cosas, pero también me da igual.

Lo que me gusta de esta película es el "cambio" que le hacen a ciertos personajes con respecto a las ideas que 12 años en un colegio religioso habían hecho crecer en mí.

En primer lugar, Judas.

Parece que el pobre hombre no era un cabron desconsiderado (de hecho, un blanco cabrón deconsiderado), sino un idealista que luchaba por lo que venía a ser el bienestar de los pobres y demás (de hecho, un negro idealista...).

Sus problemas con Jesús se deben al hecho de que Jesús comienza a acaparar demasiado la atención y a la gente no le importa su mensaje de amor, sino los fuegos artificiales que le acompañan.

La cosa esta clara, cuando los romanos se mosqueen van a venir tiempos muy duros, y Judas quiere evitarlo.

Jesús también aparece como un idealista. O más bien como un cansado idealista.

Todo el mundo le acosa con sus grandes ideas de revolución, ofreciéndole un gran poder, capaz de expulsar a los romanos y realmente liberarles. la gente le pide que arregle sus problemas físicos y le pide saber que es lo que pasará en el futuro.

Jesús les habla de otra clase de poderes, de otras liberaciones, les pide que se concentren en el Presente y dejen el Futuro para cuando llegue... Pero nadie le hace caso, la gente se queda en los signos externos y no ve su mensaje y Jesús muestra un gesto cansado y en ocasiones iracundo.

Esto se ve en varios momentos de la película, por ejemplo:

- Al principio echa en cara a sus propios apóstoles que no le conocen, que no lo comprenden.
- En la Última Cena* llega a augurar que nadie le recordará realmente porque sus seguidores no le entienden.

Finalmente, Jesús parece rendirse a ser el fenómeno de masas en que se ha convertido.

Su entrada en Jerusalén es cualquier cosa menos modesta y llega a asegurar que si cortasen las lenguas a sus seguidores, las piedras comenzarían a cantar su nombre.

Cuando reza a Dios para librarse de la muerte insinua que 3 años predicando su palabra son mucho, como excusa para librarse de su cruel destino.

Pero posiblemente la secuencia que mejor muestra esto es en la que recibe cuidados de las mujeres que le siguen, en especial Maria Magdalena, que "malgasta" un caro ungüento para tratar de desestresar a Jesús.

Judas le echa en cara que el ungüento debería haber sido vendido para repartir el dinero a los pobres, pero Jesús le detiene "¿No estarás diciendo que tenemos medios para dar de comer a todos los pobres? Siempre habrá pobres.".
Judas retrocede boquiabierto y entonces se produce un dialogo mudo con los ojos. Judas comprende que debe entregar a Cristo.

Otro personaje muy interesante es Pilatos. Más que el despreocupado romano que deniega su responsabilidad sobre los hechos, Pilatos parece un hombre muypreocupado por lo que está haciendo.

En su primer encuentro con Jesús llega sonriente. Sin embargo, no se encuentra con el revolucionario que se debía esperar, sino con un dócil personaje al que apoda "Silent King". Despúes de eso lo manda, sin una sonrisa en su cara, a Herodes.

Tras ese encuentro, Jesús se vuelve a presentar ante Pilatos para ser condenado a muerte. La cara de Pilatos es un poema. A medida que el juicio tiene lugar, Pilatos comprende que ese hombre no es un revolucionario. No es Rey en la Tierra, solo busca la Verdad... a lo sumo está algo chiflado.

Entonces se produce un enfrentamiento entre Pilatos y el pueblo. Para Pilatos Jesús no es una amenaza, no ha cometido ningun crimen y es tan peligroso como el resto de "Mesias" judíos. Durante toda la escena trata de evitar tener que tomar la fatídica decisión, hasta que Jesús le asegura que todo está ya fijado y el no podrá cambiar nada. En ese momento, y bajo las amenazas judías de rebelión, Pilatos se lava las manos.

Mientras el juicio con Herodes tiene lugar, los discípulos comprenden al fin lo que Jesús les quería enseñar y cantan una emotiva canción "Could we start again, please?".

Judas, en cambio, entiende que ha sido utilizado por el sanedrín, que lo único que buscaban era librarse de Jesús, sin importarles el pueblo, y culpa a Dios de haber sido utilizado y se suicida al grito de "Tú me has asesinado.".

------------

Bueno, hace bastante que no veo la película, así que creo que no me olvido nada. Hasta nuestras próximas reflexiones cinematográficas.

*NOTA: En la Última Cena, que tiene lugar en un campo, todos se colocan exactamente igual que en el cuadro "La Última Cena" de Leonardo Da Vinci hasta que Jesús comienza a hablar.