martes, julio 27, 2004

La Familia

No voy a hablar de mi familia. Nada de destapar trapos sucios en Internet, donde todo queda grabado y cualquiera puede manchar mi historial cuando vaya a recibir mi Premio Nobel (nunca me lo robarás).

No. Hoy voy a hablar de un desafortunado incidente que durante 5 dias o asi ha sacudido la actualidad informativa del pais. La muerte de una señora llamada Carmina Ordoñez.
Sí amigos. Hasta este ignoto lugar del ciberespacio también ha llegado un eco de esa extraña bomba informativa.

Todo comenzó cuando en el informativo de cualquier cadena de televisión que se preciara (no vi Canal +) aparecía la cara de esa señora y nos contaban su vida.
Recordaban todos esos programas a uno de esos homenajes que se rinden cuando un gran cineasta, periodista, o incluso científico (supongo) muere.

Al ver la noticia por tercera o cuarta vez, mientras comíamos y cambiabamos de canal, se me escapó un "Y eso que no hizo nada por la vida, si llega a hacer algo por la vida le levantan una estatua". En cuanto lo dije supe que tendría que aguantar un discurso de mi afectada madre que, sin embargo, dijo "La verdad es que sí...".

A los 5 minutos, en Antena 3 seguían hablando de los últimos detalles del insulso (al menos tan insulso como si se tratase de alguien anónimo) incidente, cuando al dar paso a la siguiente noticia, no abandonaron el mundo del "corazón" y se dedicaron a explicar el auge de los programas del corazón.
La noticia parecía sacada de un libro de Ray Bradbury, con personajes que trascendían mas allá de la televisión y entraban en nuestros salones para hablar con nosotros y hacernos sentirnos mejor.
Un sociólogo explicaba como la gente proyecta sus problemas sobre esas figuras visibles y encuentran así una vía de escape a su posible agobiante vida.

Todo me recordaba a las reuniones de la mujer del bombero. Sus pantallas, la familia...
Recordé lo poco que me gustaba el hecho de que aquella mujer no se enfrentase a sus problemas y cerrase sus ojos. Recordé la impotencia y la rabia del bombero.
Y mientras me preguntaba si en realidad esos programas no ejercían una buena labor al ayudar a la gente a sobrellevar sus penas cotidianas, mi madre dijo a mi padre "Ya ¿eh? Es que todos son como parte de la familia."

¿SABIAS QUE... esa misma semana se celebraba el 25 aniversario del alunizaje de Neil Armstrong y Buzz Aldrin y que su tiempo en pantalla ocupó menos que la noticia del auge de la prensa rosa? Cuestión de Prioridades

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero acaso nos importa con quien follan, o dejan de follar, toda esa ristra de "famosos", que encima, no paran de ponerse querellas unos a otros por difamaciones, conjurias, y mas gilipolleces... y despues se quejan de que vaya la justicia lenta en el pais... no te jode.. señora, si le dicen que es una guarra peguele dos bofetadas hombre!! que no son seres superiores!! Dios de que mala leche me pongo

Dulivan

Tania-chan dijo...

Y lo peor es que, varios días después, los comentarios sobre la Ordoñez siguen ocupando mañanas y tardes televisivas. Me da a mí que hasta dentro de un mesecillo no nos van a dejar en paz xD

Saludos

_Ithilien_